Al aplicar el rímel, sin importar la fórmula que elijas, el objetivo casi siempre es acentuar tus pestañas y hacer que se destaquen, y que se diferencien entre sí. Son las pestañas perfectamente separadas las que nos hacen detenernos y mirar (y luego preguntar «¿cómo?»). Si tus pestañas siempre se apelmazan, recurrimos a Shawn Towne, maquillador global de Jane Iredale, para descubrir cómo podemos dominar este objetivo de maquillaje, de una vez por todas.
La mejor técnica para conseguir pestañas separadas al aplicar el rímel
Resulta que la razón detrás de tus pestañas grumosas ni siquiera puede ser tu método de aplicación, sino tu producto, y no estamos hablando de la fórmula. “Gran parte de la formación de grumos en nuestro rímel proviene del exceso de producto que se junta y se seca en el carrete o cepillo original que vino con el rímel”, dice Towne. El rímel viejo y seco que está pegado al cepillo se pega a las pestañas y las cubre con un producto grumoso. “Asegúrate de que tu cepillo se limpie regularmente o usa un cepillo secundario para peinarlo una vez que hayas aplicado el producto”. Para hacer esto, Towne recomienda usar el cepillo Jane Iredale Deluxe Spoolie.