Cuando se trata de los secretos de belleza de las francesas, no podemos evitar gritar todo lo que sabemos a los cuatro vientos. Y aunque las mujeres parisinas han estado usando el agua micelar para aclarar el cutis durante años, ahora está creciendo en popularidad en los EE. UU., lo que nos hace preguntarnos por qué no la hemos estado usando todo este tiempo. El agua micelar contiene pequeñas bolas redondas de moléculas limpiadoras (micelas) que descomponen de manera suave y eficiente el maquillaje, la grasa y la suciedad del rostro al contacto, y eliminan por completo la necesidad de enjuagar. Creado originalmente en los años 90 como una cura para el agua dura y notoriamente dura de Francia, el agua micelar actúa como un limpiador y desmaquillador en uno, y es el producto perfecto para chicas perezosas, noches largas y cualquier persona con piel sensible.
Más adelante, encuentre cuatro de las aguas micelares que amamos y por qué necesita cambiar al lado micelar.
Agua Micelar Limpiadora Garnier
Esta agua limpiadora de Garnier es una de nuestras aguas micelares favoritas porque elimina el maquillaje como un imán. Este micelar también es súper suave para los ojos y no deja residuos grasos.
Agua Micelar de La Roche-Posay
Esta agua micelar con aroma a pera hidrata la piel con glicerina y poloxámero. Elimina rápidamente el maquillaje y la suciedad, haciendo que tu rostro se sienta hidratado y suave en un abrir y cerrar de ojos.
Este agua micelar 3 en 1 Thermale de Vichy con vitamina B5 elimina el maquillaje sin necesidad de enjuagar. El agua infundida con minerales aliviará cualquier irritación y eliminará las impurezas al estilo clásico de las chicas francesas.
Este producto del santo grial del backstage de la Semana de la Moda es un arma secreta para los maquilladores porque limpia a la perfección el delineador y el lápiz labial más difíciles. No tiene fragancia y es lo suficientemente suave para cualquier tipo de piel sensible, y te acercará un paso más a ser francés.
Crédito de la foto del héroe: Lauren Loncar, cortesía de Clémentine Desseaux, maquillaje de Joseph Carrillo